jueves, 13 de enero de 2011

Un poco de él

El.

Voy a hablar de vos. O sea de él. Voy a hablar de vos y de una de sus maravillosas cualidades. De esas peculiaridades que me hacen...quererte tanto...

Pocas personas, al menos las que forman mi mundo, tienen el magnífico poder de empeorar una conversación con tan solo una palabra, una simple respuesta que te puede hacer sentir tan desubicada como idiota, o que se yo cuantas cosas. Su intención detrás de esa brillante cualidad creativa es molestarme, simplemente eso. No hay maldad. Es como un pellizcón en el culo. Porque él adora molestarme, porque yo salto como leche hervida y me pongo combativa y saco culo y camino toda enojada como un pato (y bueno, a mi también me gusta, pero a veces NO, ¡ojo!). Me rio.

1. Yo estaba enojada, molesta, irascible, buscaroña, estaba con ganas de pelearme. No recuerdo el motivo, pero siempre logro hacer que se relacione con él de alguna forma (ji, ji, ji). El lavaba los platos apaciblemente, entro en la cocina con el culo parado, las fosas nasales hinchadas, respiro bruscamente y digo "tengo un problema" y él me responde "bueno". Silencio. ¿cómo bueno?, me deberías preguntar qué me pasa, pienso. Sigue el silencio. Me mira y se sonríe. Yo me río y le echo unas buenas puteadas musicalizando "me deberías preguntar qué me pasa" A partir de ese momento decidí crear un manual de frases de "cómo empeorar una conversación" dedicadas a vos/él.

(continuará...)




lunes, 10 de enero de 2011

Inquilinato de mi cerebro - una de ellas

A Susana no me la banco, le tengo menos paciencia que a las otras y de ella no puedo reirme tanto. Susana nació hace relativamente poco. Porque después de dar vueltas sobre mi, enroscarme en mis propios pensamientos, reprimirme y tapar la olla, mi psicóloga me propuso ponerle nombres a esas partes tan odiosas de mi personalidad. Bienvenida Susana a mi mundo. Susi y su maldita posesión, Susana y su maldita necesidad por ser la primera en todo, aunque ahí hace mecha con Madonna, que debo decir, está más preparada para ser estrella. Entre ellas se llevan bien. Yo las mataría a las dos. Les daría con un matafuego en la cabeza y las dejaría tolulas así no molestan más. Susana es posesiva, esa es su característica principal que entra en cortocircuito con mi ansia de libertad. A Susana ni en pedo me la llevo a Londres. Susana, discutis desde el absurdo. Susana lleva un tanque de gasolina encima listo para ser derramado en cualquier situación. Susana es celosa (esta palabrita, tan odiada). No, es celosa. ¡Ay! Te detesto. Detesto que necesites sentirte única, especial, maravillosa, mejor dicho que te hagan sentir así (nota mental: redactar relaciones de convivencia entre Susana y Madonna) y no cualquier persona, que exijas que MI novio te haga sentir así, me haga sentir así. Y cuando eso no pasa, Susana se pone celosa. Y esta actitud no tiene nada que ver con otras mujeres, o con el miedo hacia otras mujeres, o con la confianza hacia él, tiene que ver con la necesidad de estar en la cima todo el tiempo. Una buena dieta te vendría bien para que aprendas, puta!

¡Te voy a cobrar alquiler por usurpación de cerebro!

jueves, 6 de enero de 2011

Yo no soy Bridget Jones

No, no lo soy. Básicamente ella es rubia y yo castaña. Ella es "inglesa" y yo argentina. Ella usa esas bombachas horrorosas que solo se consiguen en Europa que son talle king size de tiro alto, y yo uso bombachas de tiro bajo (en este momento todas gastadas). Ella es media cuadradota y yo tengo una figura marcada, rellenada, pero marcada al fin. Ella vive en Londres, yo en Buenos Aires. Ella se disputa entre dos hombres ingleses, yo tengo novio. Y además yo tengo pecas. Ella es torpe y yo también. Ella es atolondrada y yo también. Ella es impulsiva y yo también.
Estamos en problemas.
Entonces si esto es así me voy a Londres y me voy ahora, porque no me banco más el verano porteño, no es cuestión de discriminar. No me banco el verano y punto. Acá o en Mali. Me voy a Londres.
Primero voy a decidir dónde quiero vivir, porque si me voy no es de turista, me voy a buscar una linda casita victoriana. La calle es Studley Road, cerca de la A114, vi las fotos de esa calle en Google Maps y me gustó. No tengo idea en qué parte de Londres queda, de hecho no conozco Londres. 
Tengo la edad que tengo ahora, vivo allá hace muchos años. ¿Cómo llegué allá? Yo, en mi mundo paralelo A, tengo pasaporte inglés. Porque mi papá es hijo de ingleses y mi mamá hija de irlandeses, datos que quizás no son relevantes a la historia pero volveré sobre esto. Me fui hace muchos años sin saber qué hacer, era estudiante de letras de la Universidad de Buenos Aires y harta de tampoco se bien qué, me fui. Y un día de invierno conocí a Jack, que es mi novio inglés. Jack que es igual a él, pero en versión inglesa, a él que sí existe. A Jack lo conocí en una plaza, a él en una esquina. A Jack lo conocí gracias a una torpeza y casi que me da vergüenza contarlo.
Era invierno en Inglaterra, yo estaba atravesando una plaza que oportunamente estaba llena de borrachos que tomaban vino caliente en taza, cosa que tampoco se si existe verdaderamente, en Alemania doy fe que sí, pero en Inglatera, who knows? (Pensé todos los detalles) Yo camino, los borrachos empiezan a hablarme, sigo caminando un poco asustada, los borrachos se acercan. Jack caminaba detrás de mi. Interviene. Yo hago un movimiento brusco y una de las tazas de vino caliente vuelca todo su contenido sobre la camisa de Jack. La historia continúa. Los borrachos desaparecen y yo me muero de vergüenza. Jack estaba vestido como para ir a una reunión y así era. Le digo que le compro una camisa nueva. Me dice que no, le digo que sí, que no, que sí, que no y finalmente que sí. Terminamos en una tienda al estilo europeo. Me olvidé un detalle: estábamos en vísperas de Navidad y él estaba yendo a la casa de sus padres a una reunión familiar. Ah! Y además no estábamos en Londres sino en Surrey. Vamos a una de esas megatiendas, que tampoco se si existen. Agarra una camisa, se la prueba, ¿yo opino? Sí, opino. Le quedaba re bien. Ahí comenzó todo.
Delirios de grandeza. (to be continued)